top of page

GMG 2023 - Deja que la inmensa gracia se desborde

La experiencia eclesiástica universal de los jóvenes de ADMA ha finalizado: este verano respondieron a la invitación del Papa Francisco para encontrarse con él en el Campo da Graça de Lisboa, con motivo de la XXXVII Jornada Mundial de la Juventud. " Finalizada ", sin embargo, no es el mejor término para describir esta experiencia. Han pasado ya dos semanas desde el regreso a tierras saboyanas y el mar de fotos, vídeos y mensajes, todos generados por los innumerables encuentros de gracia vividos sólo en esos nueve días, hablan de algo que sigue más vivo que nunca.


Pero no es ninguna novedad: dicen que esto sucede cuando tomas a María como ejemplo de vida y, como ella, "te levantas y te vas deprisa" a una tierra desconocida, a un millón y medio de hermanos y hermanas que gritan "¡Esta es la Juventud del Papa! Todo florece y cobra vida; sucede que acabas bailando, jugando y rezando juntos; cantando (en el metro), durmiendo ( poco), comiendo (lo que encuentras) e intercambiando pulseras y medallas con esa hermana brasileña que se te acerca porque ha leído "ADMA C'è" en tu espalda; sucede que esa expresión, ese verbo "levantarse" adquiere también el significado de " despertarse", "despertar a la vida".


Partimos veinticuatro, doce chicas y doce chicos, acompañados por dos animadores, entre ellos el P. Alejandro - Guía Espiritual de ADMA mundial. Nos fuimos veinticuatro y volvimos multiplicados en alegría. Algunos ya nos conocíamos, otros eran nuevos en el grupo y cada uno se acercó a esta experiencia con motivaciones diferentes, con un destino en la mente y una cruz personal en el corazón, reconociendo en cada uno el mismo llamado a involucrarse, a dejarse interpelar y a levantarse de prisa. "Deprisa" aprendimos a levantarnos por la mañana y a cambiarnos de mochila por la noche. "A toda prisa" cruzamos las calles de Lisboa para llegar al lugar del Vía Crucis y de la Vigilia con el Papa. "A toda prisa" nos enamoramos de Lisboa y de los hermanos y hermanas que allí conocimos, descubriendo una conexión más genuina que la de las redes sociales: la conexión que surge del encuentro, del compartir, del amor y del servicio.


Lisboa en nuestros corazones nunca más será sólo Lisboa, sino una invitación constante a "levantarnos e ir deprisa" para redescubrir ese Amor que -como dice el Papa- "nos hace luminosos". Será un recordatorio constante para imitar esa prisa -propia de María- "de quienes han recibido dones extraordinarios del Señor y no pueden dejar de compartir, de desbordar la inmensa gracia que han experimentado."



Comentarios


LogoAdma2015PayoffADMA-OnLine_edited.png
bottom of page